Since 2003, the GDP per capita of Tabasco has consistently figured among the 4 largest in the country. However, this level of economic activity has not translated into an equally favorable performance in other social welfare metrics. According to CONEVAL, the Tabasco poverty rate in 2016 was 50.9%, seven percentage points higher than the national rate (43.6%). On the other hand, the average monthly income of the workers of the state is in the 40th percentile of all the states.
This discrepancy can be explained because the mining activity, despite accumulating only 3% of jobs, represents more than 50% of the state's GDP. If we only consider non-oil GDP, we have that the GDP per capita of the state has tended to be located around the country's median, and for 2016 it was in the 30th percentile nationwide.
Este estudio busca identificar las capacidades productivas de Tabasco a partir de un análisis de la composición de sus exportaciones y su empleo basándose en la perspectiva de la complejidad económica. Asimismo, busca identificar productos potenciales que requieran una base de conocimientos productivos similar a la que ya tiene Tabasco y que le permita mejorar su complejidad económica actual y prospectiva.
Para tales efectos, primero se explora la evolución en el tiempo del valor de las exportaciones de Tabasco y la composición de las mismas, así como de los principales productos de exportación. En sentido, se tiene que las exportaciones de Tabasco están determinadas por el sector petrolero. Los envíos de petróleo representan alrededor del 97% de las exportaciones estatales y explican más del 90% del aumento de las exportaciones de la última década.
En este estudio se consideraron los productos priorizados en el Reporte de Complejidad Económica de Tabasco y se procedió a evaluar su potencial a partir de un conjunto de consideraciones de mercado. Luego, se agregó el potencial de cada producto en distintas colecciones de producto, y se seleccionó una industria cuya estimulación y desarrollo constituya una apuesta de desarrollo prometedora el estado. Respecto de éste se detallaron algunas estadísticas generales como una forma de evaluar su potencial de crecimiento e impacto para la economía local, estatal y nacional.
Para el objeto de este estudio, el sector industrial escogido para el análisis de cuellos de botella fue el de “Químicos” y, más puntualmente, los productos: “Agentes de limpieza orgánicos (ex. Jabón)”, “Aprestos y aceleradores de tintura”, “Mezclas de sustancias odoríferas”, “Placas fotográficas” y “Tinta”. El desarrollo de esta colección de productos representa una importante oportunidad, la que, a la fecha, los productores mexicanos no han podido aprovechar del todo. Sin embargo, estos productos han presentado un gran dinamismo dentro de México en los años recientes. Entre 2004 y 2014, las exportaciones de México en estos productos se han duplicado, el empleo en los sectores asociados a estos productos ha aumentado un 20%, y el salario promedio en estos sectores ha aumentado entre 40% y 50%.
Campeche cuenta con el PIB per cápita más alto de todo México. Si bien buena parte de este desempeño se debe a la actividad petrolera (la cual representa 80% de la actividad económica del estado), incluso si se considera únicamente el PIB no petrolero per cápita el estado se ubicaba por encima del 80% de las entidades federativas del país. En 2016 el PIB per cápita de la entidad –a pesar de ser el más alto de todo México – era 45% de su valor en 2003, lo que equivale a una caída anual promedio de aproximadamente 6%. Si bien esta caída ha sido sostenida, las razones que la subyacen parecen haber variado en el tiempo.
En el período 2003-2009 se evidenció una divergencia entre el comportamiento de la actividad petrolera y la no petrolera. Por un lado, todos los sectores de la economía no petrolera, con la excepción de servicios de apoyo a los negocios, reflejaron tasas de crecimiento positivas. Por el contrario, la actividad petrolera cayó abruptamente, debido a que a pesar de que hubo aumentos en la cantidad de pozos de desarrollo perforados y en la cantidad de equipos de perforación activos, la producción petrolera cayó 26%, alcanzado con ello niveles que no se habían observado desde 1997.